Viaje 8 (al fin este tipo se dignó seguir...)

Donde estaba???

Ah cierto (no, no me acuerdo... fui al blog y releí) acababa de llegar a Puerto Madryn llevado por una pareja de inconscientes adolescentes al volante que levantan desconocidos con un metro noventa y dos de altura y mucha barba y pinta de cualquier cosa.

Que suerte que hay gente así (como los del auto, no como el especimen que levantaron).

Bueno. LLegué a la puerta. Recuerdo, por esas cosas que tiene la memoria, la dirección exacta: Marcos Zar 1414. Si alguien pasa por Madryn (y Nuria no se mudó) le manda saludos de mi parte.

Decía. Llegué hasta su puerta. Mientras el auto que me llevaba avanzaba lentamente por la calle buscando la casa vi por una ventana una pared interior de una vivienda donde había un póster de una ballena. Claro, para casi todos ustedes esto no significa nada pero ahora les cuento.

A Nuria la conocí cursando el CBC en Drago (espero que todos sepan qué es Drago, además de un sifón (espero que eso también lo sepan (bah, qué sé yo))). Ella iba a estudiar biología y yo ciencias matemáticas. Cursábamos juntos una sola materia: Sociedad y Estado.

La cuestión, para abreviar, es que empezamos a salir. Ibamos a Margarita (rock & roll) y ella usaba borceguíes y medias red negras y se pintaba los ojos re dark. Fanática de los Ramones y así por el estilo.

Yo venía saliendo de una relación larga (tenía 18 años en ese entonces, año 94) y me enganché.
El día que fui a la casa por primera vez me sorprendí mucho. Primero porque después de varias veces de vernos en el boliche, la vi "de civil", con un jean y una remera y sin su maquillaje oscuro. Y me gustó más. Segundo porque la vi interactuar con sus padres y era una hija ejemplar, se llevaba bien con ellos y ellos me trataron excelente.

Pero lo más sorprendente fue ver su cuarto. Tenía un (repito, UN) poster de ramones y 5 (si, CINCO) posters de pinguinos, ballenas, focas. Y tenía peluches de todas esas cosas.

La mina era un pan de dios, más sana que el quaker, mas inofensiva que lassie con bozal.

Bue. Cuando vi el poster desde el auto a las 9 de la noche de cierto día de marzo dije: "es ahí"

Me bajé, les agradecí y me paré frente a la puerta. Aspiré profundo, otra vez como para sumergirme, y toqué timbre.

...

...

Abrió la puerta una chica, otra chica, no Nuria.

Nuria no estaba.

(anuncio: en el próximo post, y tal vez en el siguiente también, haré un paréntesis explicativo sobre como continuó la breve historia de Nuria, no la del viaje central, sino la del pasado, la del 94. espero que se entienda bien. Si no avisen, que vuelvo a explicar.)